Llamamos demanda de trabajo a la realizada por las empresas. Estas, como agente económico, requieren del empleo del factor trabajo para poder producir bienes y servicios que ofrecer en el mercado con el objetivo de obtener beneficios.
¿De qué factores depende la demanda de trabajo?
No existe una única curva de demanda de trabajo, ya que, como mencioné en este otro artículo, el trabajo no es bien homogéneo (ni es un bien, ni es homogéneo). No obstante, es posible identificar algunos factores que, en mayor o menor medida, afectarán a la posición y comportamiento de demanda de trabajo en cualquier sector.
→ El salario (w). Para las empresas, el coste de un trabajador en plantilla es superior al salario que percibe este. Y esto es porque las empresas, al igual que los trabajadores, también deben cotizar a la Seguridad Social. También deben establecerse ciertas medidas de prevención de riesgos, quizás alguna capacitación, etc, y todos ellos suponen un coste para la empresa. La consecuencia es que la oferta y la demanda de trabajo tienen concepciones diferentes en cuanto a lo que consideran salario.

→ La demanda del bien que se produce. No olvidemos que la demanda de trabajo es una demanda derivada, y esto es así porque el nivel de contratación depende del volumen de producción y ventas esperado de la empresa. Cuanto más se produzca más factor trabajo será necesario. Y al contrario, en situaciones de desaceleración económica o crisis, las empresas ajustarán sus plantillas, reduciendo la contratación, los salarios e incluso destruyendo empleo.
→ La productividad del trabajo. La productividad, que explico aquí, en una medida de la eficiencia de los recursos empleados. Podemos entender que, cuanto mayor sea la productividad del trabajo, mayor será el valor que genera a través del proceso productivo. Podemos afirmar entonces que todas las variables que puedan afectar a la productividad del trabajo condicionarán a la demanda de trabajo. En este sentido, la mejora en la formación del capital humano, una mayor experiencia en el puesto de trabajo, una motivación adecuada de las plantillas de trabajadores, políticas en I+D+i que impulsen la productividad lograrán un desplazamiento de la curva de demanda de trabajo a la derecha. Dicho de otra forma, a un mismo nivel de salarios, si aumenta la productividad del trabajo en una empresa, el empresario estará dispuesto a aumentar la contratación.
→ El valor del ingreso marginal. El valor del ingreso marginal es el ingreso que la empresa obtiene por la última unidad producida y vendida. Este ingreso marginal viene determinado por el precio al que la empresa vende el bien o presta el servicio que produce. Si la empresa obtiene, para cada nivel de coste, unos ingresos mayores debido a un mayor precio de venta, el valor de lo producido por cada uno de los trabajadores aumenta y, por tanto, la empresa, para un nivel determinado de salario, estaría dispuesta a aumentar la contratación.